La gestión de patrimonio es el proceso mediante el cual se administra y se protege el patrimonio de una persona, familia o institución. Este patrimonio puede estar compuesto por activos financieros, propiedades inmobiliarias, empresas, obras de arte, entre otros.

La gestión de patrimonio implica la toma de decisiones estratégicas para maximizar el rendimiento de los activos, minimizar riesgos, planificar la sucesión generacional, optimizar la carga fiscal y asegurar la estabilidad financiera a largo plazo.

Los gestores de patrimonio, también conocidos como asesores financieros o planificadores financieros, son profesionales especializados en el manejo de patrimonios, que ofrecen asesoramiento personalizado para ayudar a sus clientes a alcanzar sus objetivos financieros y a proteger su riqueza.

En resumen, la gestión de patrimonio es fundamental para garantizar la preservación y el crecimiento del capital a lo largo del tiempo, así como para planificar el futuro financiero de las personas y las familias.